Comparto con todos vosotros mi segunda escultura poética. En
esta ocasión no es un enigma arqueológico sino romántico. Se trata de la
maravillosa escultura de Antonio Cánova titulada El Beso de Eros y Psique. Este
genio del estilo neoclásico logró petrificar un momento de intensa pasión que
para algunos es simplemente amorosa, pero otros creemos que es profundamente
mística. Espero que la belleza que supuso para mí este abrazo cálido y colorido
del arte os envuelva también a vosotros. Una vez más, mis infinitas gracias a
Daniel Capllonch por ayudarme a plasmar este elixir poético en imágenes y por
prestarme su voz.
Naty Sánchez